Una cuenta de ahorro es una herramienta financiera clave que puede ayudarte a administrar tus finanzas y alcanzar tus metas financieras. Pero con tantos tipos de cuentas de ahorro disponibles, puede ser difícil saber cuál es la adecuada para ti.
Es por eso que a continuación te hablaremos de los diferentes tipos de cuentas de ahorro que existen para que puedas tomar una decisión informada y seleccionar la que mejor se adapte a tus necesidades.
Cuentas de ahorro tradicionales
Las cuentas de ahorro tradicionales son probablemente el tipo de cuenta que más te suenan conocidas. Estas son cuentas que puedes abrir en un banco, cooperativa de crédito u otra institución financiera.
Por lo general, una cuenta de ahorro tradicional es una cuenta de depósito en la que puedes guardar tu dinero y ganar intereses mientras tanto, sin tener que preocuparte por la incertidumbre del mercado accionario y los posibles riesgos que este conlleva.
Las tasas de interés por lo general son bajas, pero son excelentes porque son muy seguras y se pueden utilizar para cualquier propósito de ahorro a corto plazo, ya sea crear un fondo de emergencia o ahorrar para pequeños gastos.
Cuentas de ahorro de alta rentabilidad
Las cuentas de ahorro de alta rentabilidad son una excelente opción para aquellos que buscan una mayor tasa de interés en sus ahorros. Las mismas ofrecen tasas de interés más altas de lo normal, lo que significa que puedes ganar más dinero en tus ahorros.
La forma de obtener una tasa más alta generalmente es selectiva y tiene sus condiciones, como el mantenimiento de un saldo mínimo y bastante superior al que se exige en las cuentas de ahorro tradicionales; sin embargo, si tienes la cantidad adecuada de efectivo disponible para abrir y mantener una de estas cuentas, probablemente te convendría considerar una cuenta de alta rentabilidad como una opción de inversión a corto plazo.
Cuentas del mercado monetario
Otra opción popular para los ahorristas es una cuenta del mercado monetario. Estas funcionan de manera similar a las cuentas de ahorro tradicionales, pero tienden a ofrecer tasas de interés más altas, como las cuentas de ahorro de alta rentabilidad.
La diferencia es que las cuentas del mercado monetario por lo general tienen un límite mínimo de depósito y requieren que mantengas un saldo mínimo en tu cuenta para recibir la tasa de interés aumentada. Sin embargo, al ser una cuenta con tasas de interés variables es difícil asegurar una tasa alta estable garantizada en el futuro.
Cuentas de ahorro a plazo fijo
Las cuentas a plazo fijo son una opción en la que debes invertir una cantidad de dinero por un período fijo de tiempo (generalmente de 6 a 12 meses o más).
Estas cuentas ofrecen tasas de interés más altas que las cuentas tradicionales, pero a cambio, no tendrás acceso a tu dinero hasta que expire el plazo acordado.